Confesión

Llevo unos días queriendo abrir mi alma, y no me atrevía puesto que a una parte de mi le da miedo abrir el corazón de la manera que voy a hacerlo, pero necesito hacerlo para poder continuar con mi camino.

No todo en mi vida fue un camino de rosas como ya os he contado y parte de ese dolor en cierto modo fue causado por mi. Si, como leéis, yo también he tenido gran parte de la culpa de por que quizá yo haya sido apartada de mi núcleo familiar, o por lo menos yo lo entiendo así intentando buscar una explicación de por que mi familia me dio la espalda.

Siempre he culpado a mi madre de mi desgracia quizá por que en ese momento era lo mas fácil de hacer y por que quizá yo o quise asumir mi culpa.

Ya os conté que vengo de una familia desestructurada, que fui arrancada de la ciudad donde me crie durante diez años y que mi comportamiento no fue ejemplar, pero lo que no sabéis es hasta que punto mi comportamiento fue para mi familia un verdadero infierno, ahora que necesito soltar porque cada vez estoy trabajando mas en ello quiero dar este paso y entender las posibles razones por lo que a día de hoy estoy completamente sola. Después de 7 años sin tener relación con mi madre sigo sin saber por que este silencio

Fui un monstruo, literalmente. Con 15 años ya no había nadie que pudiera conmigo, ¿os acordáis de aquel programa de televisión que se llamaba "hermano mayor"? Pues todo lo que se enseñaba en ese programa en mi vida real se quedaba corto.

Con 13 años robaba, si, le robaba dinero a mi madre para fardar delante de los que por aquel entonces creía mis amigos, necesitaba sentirme con poder para no quedarme atrás, eso lo aprendí de mi padre, ser una fanfarrona y poder presumir de que en mi bolsillo había 10000 pesetas de las de antes me daba poder, podía hacer y decir lo que quisiera, daba igual de donde sacara el dinero, he llegado hasta robar las cuotas de la comunidad de mis vecinos siendo mi madre la presidenta para comprar mierdas.

Con 14 años salí por primera vez de noche, fumaba y probé el alcohol, me saltaba a la torera el horario, siempre llagaba tarde y por mas que mi madre me castigara, pegara no atendía a razón, acabado el castigo volvía a hacerlo una y otra vez.

Con 15 años ya me drogaba, y esa sensación me daba aun mas poder, por lo que empecé a robar mas, a enfrentarme a mi madre diciéndole cosas horribles, la engañaba, la robaba y hacia lo que me daba la gana. Yo no soy madre, pero las que me leéis imagino lo que estaréis pensando, que era una persona horrible. Y lo era.

Empecé a robarle a mi hermana, otra de las grandes hazañas que aprendí de mi padre, con 10 años veía como el me robaba dinero de mi hucha y yo plagie a la perfección el acto de hacerlo a una niña de 6, por lo que también comencé a hacerle daño a ella. Y realmente no me importaba absolutamente nada, tan solo quería seguir con mi vida inventada.

Con 16 empecé a trabajar en un bar de copas, por lo que a partir de ese momento ya no había nadie que pudiese conmigo, no quería estudiar por lo que si o si tenia que trabajar y al hacerlo con permiso y de noche fue la puerta perfecta para adentrarme aun mas en el mundo del alcohol y de las drogas. Se me daba bien, me sentía bien. Me gustaba trabajar de camarera, me sentía fuerte, deseada, en la barra mandaba yo y era muy excitante.

No había finde semana que no tuviera una pelea, fui denunciada hasta en dos ocasiones por pegarle a una chica la cual no me había hecho absolutamente nada, pero en mi estado y por culpa de unos amigos la chica acabo en el hospital con la nariz y la boca rotas.

No había nadie que me tosiera, ya no solo por mi, si no por la gente que teníamos al rededor, actualmente lo llaman bandas, y si, yo iba en una de ellas. Hacíamos lo que queríamos a nuestro antojo y todo el mundo nos temía.

Aprendí a defenderme a base de palos, con 17 años ya sabia manejar una navaja y disparar un arma, en mi vida he llevado una encima pero si sabia como usarla en caso de emergencia.

En casa entraba y salía a mi antojo, las discusiones con mi madre cada vez eran mas frecuente, le chillaba, le hablaba sin respeto, le deseaba cosas horribles tanto a ella como a mi hermana, he llegado a casa drogada, borracha y en muy mal estado, hasta que las peleas cesaron, he llegado a percibir que mi madre tenia miedo, y eso me daba aun mas poder, por lo que con 18 años en mi casa prácticamente mandaba yo. Lo sabia y me gustaba.

Pasaron dos años de lujuria constante, llevaba chicos a casa, cada fin de semana uno distinto, me venia a buscar a casa gente que a día de hoy les prohibiría la entrada, me iba con cualquiera de fiesta, solo por diversión, me he montado en coches con gente bebida, drogada, pero jamás tuve un accidente, he disfrutado (o no) de mi vida sexual hasta el punto de no acordarme como y con quien, pero siempre he tenido una cosa clara que mi salud sexual estaba por encima de todo, jamás he tenido un susto, pero si he tenido que luchar con muchas enfermedades de trasmisión sexual que a día de hoy aun sigo en tratamiento.

Con 20 años me fui a vivir a Madrid con la persona que creía que me iba a amar para siempre, no fue hasta que las cosas empezaron a ir mal cuando me di cuanta que era igual de poderosa que ingenua, esta persona me llevo aun mas al fondo de un pozo del que no era capaz de salir, consumía a diario, sufrí malos tratos tanto físicos como psicológicos y necesitaba evadirme de aquel infierno al precio que fuera, contrato prestamos a mi nombre, debía miles de euros en cocaina que había adquirido la cual el mismo había consumido con su banda de amigos y cuando comenzó la crisis del 2008 tuvimos que irnos por que la deuda era tan grande que nuestra vida corría peligro, por aquel entonces no tenia relación con mi familia y tuve que volver a ese pueblo con la familia de esta persona la cual nunca me había aceptado por que consideraban que mi estatus familiar estaba por encima de ellos. Que tontería, pero siempre se metían conmigo por eso mismo y me hacia daño.

No se exactamente que fue lo que me llevo a ir a casa de mi madre y pedirle perdón por todas las atrocidades que había cometido durante tantísimos años, ella cedió, pero no del todo, algo había en ella que no terminaba de fiarse y en pare la entendía, pero yo hacia como si nada, tal y como mi padre hacia cada vez que le ponía la mano encima, al día siguiente era como si no hubiese pasado nada, mi madre a la par de buena es muy rencorosa, la vida la hizo ser así, desconfiada, con miedo, y ahora la entiendo bastante bien, pero también se que no se puede llevar una vida saludable con rencor, es incompatible, pero la respeto.

Después de 7 años sin relación como bien os he comentado no se el motivo que ha llevado a mi madre a desaparecer de mi vida, y durante 6 el tormento que he vivido por ello ha sido el peor de los dolores que he tenido que soportar, la indiferencia de una madre que no te expresa con palabras el motivo por el cual no quiere saber nada de ti, quizá este en ese punto, quiere que sepa lo que se siente, quizá no hay motivo y simplemente deja que sea feliz con mi forma de vida (somos muy distintas), no lo se.

Tan solo quiero que sepa que la perdono, no se si algún día leerá este post, si ha leído todos los escritos hasta ahora y la hayan enfurecido mas, pero quiero que sepa que es la única manera que tengo y que he encontrado de expresar lo que siento, que necesito soltar toda esta carga de alguna manera y esta es la que mejor me resulta, escribir, mi terapeuta así me lo hizo saber, Raquel, escribe todo lo que sientas note guardes nada, estarás ayudándote y quien sabe si ayudaras a alguien mas por el camino.

También quiero que sepa que entiendo perfectamente como se siente, todo el daño que he podido causarlas, a las dos, pero necesito que entiendan que ha sido la única manera que he tenido para sobrellevar todo el abandono y el rencor que hemos tenido que sufrir, tan solo quiero que entiendan que yo no soy como ellas, que soy un alma libre que estuvo encerrada en una jaula de la cual lo único que quería era salir de ella, que todo el dolor que yo tenia en mis adentros necesitaba evadirlo de alguna manera y quizá no fue la correcta pero si ha sido la única que me a hecho aprender.

Deciros también que nunca he sido fuerte, he sido una niña asustada en todo momento que lo único que necesitaba era que te sentaras con ella y le dijeras, "tranquila todo esta bien y saldremos adelante", se me cargaron responsabilidades de adulta cuando tan solo tenia que estar jugando con muñecas, no se me permitió venirme abajo en ningún momento, había que ser dura, fuerte y eso para una niña de 11 años es demasiado, se tiro por la vía fácil "es igual que su padre" "no puedo con ella", vivir con ese estigma es bastante duro, que me estés comparando continuamente con la persona que me abandono, la que me partió en dos y a la cual te guste o no quería con toda mi alma (a pesar de sus actos) es insoportable y cuanto mas lo hacías, peor me portaba.

No estoy diciendo que lo hayas hecho mal, al fin y al cabo cada padre educa de la mejor manera que puede, pero si voy a decirte que conmigo te equivocaste, el camino no era por ahí. En una separación tan toxica los únicos que sufrimos somos lo hijos, en este caso solo yo, tan solo por el parentesco, déjame decirte que en ese aspecto lo hiciste mal, ese no era el camino conmigo. Y no, no es envidia, como también te gustaba decirme a cada momento, jamás he tenido envidia de nada, quizá tan solo de una cosa, la atención no era la misma, yo cargaba con todo lo malo, y déjame decirte que no has parido a ninguna santa. Ninguna de las dos. No voy a juzgarte por ello, esta bien así, gracias a todo ahora soy la mujer que soy. Mas "gastosa" de lo que tu puedas imaginar. Y en parte en gracias a ti.

Dicen que para vivir en paz necesitamos perdonar, y yo ya lo hice con vosotras, necesito hacerlo por mi salud mental, esa que esta tan de moda ahora, pero no es moda, es necesidad, ha pasado el tiempo suficiente para sentarme aquí delante de este ordenador para decir todo lo que siento. Al igual que os digo que siento cada insulto, cada palabra mal sonante, cada impulso, cada temeridad, cada abuso que hayáis sentido por mi parte. No digo que me perdonéis  y que todo sea como antes, no lo quiero, mentalmente estoy bastante bien y no quiero estar dependiendo del vuestro.

Tan solo os recomiendo algo, para poder perdonar primero debéis perdonaros a vosotras mismas, hacerlo si lo veis necesario, si no, solo puedo deciros y desearos una cosa.

Que os valla bien. 

Yo ahora, ya estoy bien.